Es bastante común, entre los pueblos indígenas, la existencia de una división entre las tareas de los hombres y de las mujeres. Esto significa que existen actividades que son realizadas solamente por las mujeres y otras solamente por los hombres.

Criança Nambikwara Mamaindê observa mulheres lavando roupa na beira do rio, Aldeia Central, Mato Grosso. Foto: Kristian Bengtson, 2003.
Criança Nambikwara Mamaindê observa mulheres lavando roupa na beira do rio, Aldeia Central, Mato Grosso. Foto: Kristian Bengtson, 2003.

Aunque esta división sea igual en todos los pueblos, las tareas relacionadas a la preparación de los alimentos, al cuidado de los niños y algunas actividades en el campo de cultivo son, generalmente, la responsabilidad de las mujeres. Por su parte, los hombres son los responsables en desmontar el bosque para la implantación del campo de cultivo, por las actividades de caza y la guerra, entre otras.

Es importante mencionar que las actividades realizadas por cada uno de los géneros (femenino o masculino) se complementan dado que unidos garantizan la calidad de vida de toda la comunidad.

¿Ya imaginaron cómo sería la comida de una familia sin el trabajo realizado por los hombres que salen a cazar o a pescar? ¿Y como los alimentos serían elaborados sin el trabajo de las mujeres que preparan toda la comida?

Juntos, los hombres y las mujeres, son los responsables por la producción de los alimentos, de las redes, de los bancos, de las casas, de las canoas, de las herramientas utilizadas todos los días como los potes de cerámica, los cestos, las flechas, los arcos, entre otros. Vemos de esta forma que el trabajo de cada miembro del grupo es fundamental para toda la comunidad.

Menino Waimiri-atroari com seu arco em miniatura. Foto: Sergio Bloch, 2000.
Menino Waimiri-atroari com seu arco em miniatura. Foto: Sergio Bloch, 2000.

Los niños aprenden desde temprano las tareas cotidianas y es muy común ver a una niña ayudando a su madre o a un niño acompañando a su padre en sus quehaceres. Los niños construyen objetos iguales a los que los adultos elaboran, aunque en miniatura.

De esta manera, jugando a imitar a los mayores, los niños y las niñas aprenden las actividades que más tarde desempeñarán con perfección.

¿Quién produce el algodón entre los Panará?

Terra Indígena dos Panará. Fonte: Instituto Socioambierntal, 2009.
Terra Indígena dos Panará. Fonte: Instituto Socioambierntal, 2009.

Los Panará, también conocidos como los Krenakore, vivieron durante veinte años en el Parque Indígena de Xingú (estado de Mato Grosso).

Recientemente, ellos reconquistaron su antiguo territorio en donde construyeron una nueva aldea. Su tierra está localizada en los estados de Mato Grosso y Pará. Los Panará hablan una lengua de la familia Jê.

El texto que sigue, retirado del libro Ecologia, Economia e Cultura (2005), nos habla sobre la importancia de las mujeres en la producción del algodón.

División de tareas entre los Kisêdjê

 

Localização do Parque Indígena do Xingu. Fonte: Instituto Socioambiental, 2009.
Localização do Parque Indígena do Xingu. Fonte: Instituto Socioambiental, 2009.

Los Kisêdjê, también llamados Suyá, viven en el Parque indígena de Xingú. entre ellos, las actividades femeninas y masculinas son bien diferentes.

El texto que sigue fue retirado del libro Geografia Indígena (1996) y cuenta un poco sobre qué es lo que hacen los hombres y las mujeres de la aldea.

 

¿Cómo es que los Kisêdjê preparan el “polvillo”?

Para producir el “polvillo” lo que se necesita en primer lugar es la mandioca. En el campo de cultivo cada uno tiene su papel: el hombre prepara la tierra para la plantación, desmonta el bosque, y quema las plantas. Las mujeres recogen la mandioca de la tierra y la llevan hasta la aldea.

El texto que sigue fue recogido del libro Saúde, Nutrição e Cultura no Xingu (2004) y relata el papel de la mujer y del hombre en la preparación del “polvillo”.

Fuentes de información

¡Son las mujeres las que cuidan el algodón!

El algodón nace cuando plantamos las semillas. La planta de algodón es pequeña y demora casi un año para comenzar a producir.

Pé de algodão. Desenho de Krekreasã Panará. Fonte: Ecologia, Economia e Cultura (1), 2005. Atix/ISA.
Pé de algodão. Desenho de Krekreasã Panará. Fonte: Ecologia, Economia e Cultura (1), 2005. Atix/ISA.

Cuando el algodón comienza a fructificar la mujer la cela con mucho cuidado. Para que no muera, siempre debe limpiar el lugar en donde fue plantada. La mujer es la dueña del algodón.

Ese algodón es encontrado en el campo de cultivo muy cerca de la casa. La mujer va a buscar la planta y trae sólo las pequeñas frutas para poder elaborar los hilos. No es necesario que los corte, sólo debe separar la fruta de la planta. Cuando la persona la corta, acaba con un recurso natural. Las mujeres hilan el algodón y los hombres lo utilizan fara realizar sus tocados.

Antiguamente usábamos mucho el algodón para fabricar cinturones y flechas; mi pueblo Panará siempre guardaba las semillas del algodón para poder plantarlas en la época de las lluvias. Los Panará antiguos utilizaban el algodón cuando no tenían contacto con los no indios. Hasta el momento nosotros lo utilizamos para hacer tocados, cestos, flechas, cinturones collares y aros.

Antiguamente siempre guardábamos las semillas del algodón para que no se terminase ese recurso natural, por eso siempre las mujeres cuidan de ese algodón para que pueda producir. Si no cuidamos y no lo guardamos como corresponde la semilla del algodón se arruina y no es posible que produzca. Por eso mi pueblo siempre lo cuidó de esta manera.

Texto de Krekreasã Panará

Una aldea en el Xingú

Nosotros vivimos en la aldea; cada pueblo habitante de Xingú tiene sus costumbres diferentes a los otros.

En las aldeas, los hombres y las mujeres tienen sus quehaceres pero no todos estos trabajos son los mismos.

Los trabajos de los hombres son: hacer canoas, arcos, flechas, casas, tocados, bancos para sentarse, remos, artefactos para secar la masa de la mandioca (jirau), establecer los campos de cultivo, desmatar, plantar, pescar, buscar leña, limpiar la hierba mala debajo de las plantas, cazar, despuntar leña, recolectar miel, cortar las ramas de mandioca, y otras actividades.

Los trabajos de las mujeres son: fabricar las redes, las esteras para exprimir la masa de la mandioca, elaborar el beiju, hacer la comida, fabricar collares, Limpiar la casa, rallar la mandioca y, de vez en cuando, los hombres colaboran en la tarea de transportar la macaxeira o mandioca.

Quien recibe a las visitas es el cacique y, si no se encuentra en la aldea, sus representantes aunque las vistas deben respetarlos a todos para conversar.

Nos son todas las personas quienes pueden presentarse y llevar las visitas a sus hogares, tienen que llevarlos a la casa del cacique o de sus representantes.

En el centro de la aldea hay una pequeña casa en donde sólo los hombres pueden entrar. De vez en cuando pueden hacerlo las mujeres especialmente cuando se produce alguna noticia importante para todos.

En esta pequeña casa los hombres pueden reunirse, hacer artesanías, comidas o cualquier otra cosa.

Las mujeres, a veces, pueden reunirse, hacer comidas, bebidas, hacer las cosas que les corresponden pero son los hombres quienes poseen la casa.

En la aldea hay fiestas en las que las mujeres y los hombres pueden bailar juntos, hay otras fiestas en las que las mujeres no pueden estar presentes ni verlas y también están los juegos en la lluvia.

(texto de Kaomi Suyá)

El “polvillo” de mandioca

Desenho de Pepotxi Suiá. Fonte: Saúde, Nutrição e Cultura no Xingu. Instituto Socioambiental (ISA), Associação Terra Indígena do Xingu (ATIX)e Imprensa Oficial, 2004.
Desenho de Pepotxi Suiá. Fonte: Saúde, Nutrição e Cultura no Xingu. Instituto Socioambiental (ISA), Associação Terra Indígena do Xingu (ATIX)e Imprensa Oficial, 2004.

Voy a contar un poco sobre el polvillo que nosotros guardamos para comer en la época de la lluvia. En la época de la estación seca, las mujeres rallan la mandioca para poder secar el polvillo. Ellas recolectan la mandioca de mayo a julio.

 

Los hombres hacen cestos para guardar el polvillo seco. Ese polvillo dura hasta un año.

Las mujeres hacen el beiju, el mingau, mezclan el polvillo con perereba dulce y otras comidas.

Es así que nosotros, los Suyá, hacemos el polvillo todos los años.

(texto de Nhokretxi Suiá y Pepotxi Suiá)

  • Associação Terra Indígena do Xingu (ATIX) e Instituto Socioambiental (ISA)

Ecologia, Economia e Cultura - livro 1 (2005).

  • Associação Terra Indígena do Xingu (ATIX) e Instituto Socioambiental (ISA)

Geografia Indígena (1996).

  • Eduardo Viveiros de Castro

Araweté: o povo do Ipixuna (1992).

¿Quién hace qué entre los Araweté?

Los Araweté viven en el estado de Pará y hablan una lengua de la familia Tupí-Guaraní. Son cazadores y agricultores y habitan una única aldea cercana al arroyo Ipixuna.

Todo hombre araweté, desde la adolescencia, posee su arco y sus flechas y le encanta exhibirlos paseando con sus objetos por la aldea y llevándolos con orgullo en las fiestas. Tanto los jóvenes como los adultos pasan una gran parte de su tiempo fabricando y reparando sus arcos y flechas. Ellos usan tres tipos de flechas: una para cazar animales y dos para atrapar pájaros, peces y mamíferos pequeños.

Irawadïdä, homem Araweté, queimando a entrada de uma colmeia de iwahä (mel de xupé) num jatobá. Foto: Eduardo Viveiros de Castro, 1982.
Irawadïdä, homem Araweté, queimando a entrada de uma colmeia de iwahä (mel de xupé) num jatobá. Foto: Eduardo Viveiros de Castro, 1982.

En la época de la miel, los hombres salen a buscar colmenas en los árboles. Estas excursiones en la selva siempre son animadas y divertidas, con muchas conversaciones y juegos que ocurren mientras se recorren los senderos. Aunque las mujeres no sean responsables por recolectar la miel, es muy importante que las mismas acompañen a los hombres porque de esta manera pueden recoger hojas de açaí para elaborar yiyipe (recipiente en donde se toma la miel) y salir en la búsqueda de castañas de pará.

Mulher Araweté separando sementes de urucum. Foto: Eduardo Viveiros de Castro/ISA.
Mulher Araweté separando sementes de urucum. Foto: Eduardo Viveiros de Castro/ISA.

Las mujeres pasan muchas horas del día ocupadas en la producción de hilos de algodón para fabricar las redes y las ropas que se utilizan, como los paños para la cabeza, la tipóia, la cinta interna y la falda externa que visten desde pequeñas. Son ellas quienes elaboran la tinta de urucú, utilizada para teñir de rojo sus paños y para pintarse el rostro.

 

Meninas Araweté pescando no lajeiro do Ipixuna, Terra Indígena Araweté/Igarapé Ipixuna (PA). Foto: Eduardo Viveiros de Castro/ISA.
Meninas Araweté pescando no lajeiro do Ipixuna, Terra Indígena Araweté/Igarapé Ipixuna (PA). Foto: Eduardo Viveiros de Castro/ISA.

Además de lo mencionado, es una tarea femenina y también de los niños recoger las espigas de maíz y hacer la harina. La pesca, cuando no es realizada con el timbó pero si con la línea o con arco y flecha es una actividad que normalmente hacen las mujeres así como los niños y niñas.

De esta manera, jugando o no jugando, todas las personas, tanto sean infantes, adultos o jóvenes, realizan trabajos que se complementan y participan en la producción de todo lo que es necesario e importante para la vida en la comunidad.